Reliquia, reliquiorum
no me extraña que el pobre San José (pepe para los amigos) suspirara! Ay, cómo para no, No tenía él bastante con que viene un arcángel y después de su anuncio, la parienta le dice que está encinta, sin haber conocido varón, pero encinta, vamos que a ver cómo lo explica a los demás carpinteros. Pues que normal que se conserven las plumas del arcángel, a cachitos se las fue arrancando nuestro Pepe. Lógica pura. Luego, pues que con esto del embarazo divino, todo son cambios y la leche materna pues sale pasteurizada y enriquecida con omega 3, supongo, y es de conservación permanente. Y bueno, ya tenía todo esto superado el Padre Putativo por excelencia, pero le sale el hijo con 14 prepucios, que a los 12 años se le va de casa a perderse por esos templos de Dios y le habla raro y encima se junta con el Bautista que tiene dos cráneos, el de pequeño y el de mayor. Y para colmo, antes de morirse se junta con todos sus amigos a comer unas lentejas y después van y le matan y se va al cielo dejándose los prepucios olvidados en habitaciones y lugares sagrados o vaya usté a saber. Con este panorama familiar, cómo no va a suspirar el pobre San José, ya lo dice el refrán, lo que no va en lágrimas, va en suspiros y si no, que se lo digan al Espíritu Santo que no pudo por menos que estornudar. Jesús!